Cuba. – Se registraron dos nuevas explosiones en los depósitos de combustibles de la ciudad de Matanzas en el occidente de Cuba, el hecho ocurrió luego de que un tercer tanque colapsara este lunes en la zona industrial.
Los últimos reportes apuntan a que el viento está empujando la nube tóxica sobre la ciudad, por lo que el Centro Provincial de Pronósticos del Instituto de Meteorología pide a los ciudadanos que utilicen mascarillas y se protejan de las toxinas.
El grave incendio industrial que sufre Cuba va a provocar que en el horario de mayor consumo sólo se podrá satisfacer el 60 % de la demanda de electricidad en el país.
La compañía estatal Unión Eléctrica de Cuba (UNE) indicó que esta situación se debe a que, a las dificultades que atraviesa desde hace meses el sistema energético nacional, se suma la desconexión forzada de la termoeléctrica Antonio Guiteras -una de las mayores del país- por el siniestro.
Estas instalaciones, a 2,7 kilómetros del parque de depósitos de combustible que arden desde el viernes en Matanzas, cerraron por falta de agua para refrigeración. Esto ha provocado que la UNE eleve la afectación prevista para el horario de mayor consumo de esta jornada hasta los 1.200 megavatios (MW).
El cierre temporal de la central se debe a que el suministro de agua quedó interrumpido durante la noche debido a las operaciones para sofocar las llamas en la zona del siniestro.
La termoeléctrica no volverá a funcionar para el horario de máximo consumo, a última hora del día, según declaró a la televisión estatal Lázaro Guerra Hernández, director técnico de la UNE.
Hernández también señaló que el bombeo de combustible hacia la central está interrumpido y que se trasladarán cisternas con agua desde la provincia vecina de Mayabeque (occidente).
Los apagones se han convertido en el reto principal de la dictadura cubana, según los expertos, que destacan el lastre que suponen para una economía ya en crisis, la imposibilidad de atajarlos a corto plazo y su capacidad para atizar el descontento social.