REDACCIÓN- El expresidente peruano Alejandro Toledo reclamado por la Justicia de su país desde finales de 2017, se entregó este viernes a la Corte de San José, en California (EE.UU.), para ser extraditado a Perú.
El expresidente llegó al tribunal y evitó entrar por la puerta principal para no encontrarse con los medios de comunicación.
Toledo exigió a la justicia de su país que no permita su “muerte en prisión”.
El expresidente estaba obligado a entregarse a las autoridades este viernes por la mañana en el edificio Robert F. Peckham, sede del Tribunal del Distrito Norte de California, en la ciudad de San José.
Está previsto que Toledo pase a disposición del Servicio Federal de Alguaciles, que lo mantendrá en una cárcel del condado de San Mateo (EE.UU.) antes de enviarlo a Perú.
Toledo está imputado en su país por la presunta comisión de los delitos de lavado de activos, colusión y tráfico de influencias en relación con el escándalo Odebrecht, que, a su vez, forma parte del conocido Caso Lava Jato y que salpicó a diferentes dirigentes latinoamericanos.