Santo Domingo.-Violencia, guerra total y un enfrentamiento civil sin precedentes es lo que le depara a Haití, de acuerdo a nacionalistas y otros sectores, tras la dimisión del primer ministro, Ariel Henry, en medio de una cada vez más recrudecida crisis política, social y económica.
El país más pobre de Latinoamérica arribó este miércoles a su segundo día acéfalo, luego de que Henry se viera obligado a renunciar del cargo, con el que aunque ya de manera ilegítima llevaba las riendas del también denominado «Estado fallido«.
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— Noticias Telemicro (@NTelemicro5) March 14, 2024
Sectores vislumbran un agravamiento de la situación, en la que la comunidad internacional es la única solución.
Rechazaron, además, la petición hecha por la portavoz de la ONU, de parar las deportaciones forzosas, las que el canciller Roberto Álvarez afirmó continuarán, en cumplimiento a la política migratoria dominicana.
Según el acuerdo de de la comunidad del Caribe, con el cual se busca la creación de un consejo presidencial para dirigir una transición y realizar elecciones en Haití, no puede ser parte del consejo cualquier persona que esté actualmente bajo un cargo, acusación o haya sido condenado en cualquier jurisdicción o esté bajo sanción de la ONU, por lo que Guy Phillippe y Barbecue estarían fuera.
