ESTADOS UNIDOS.- Serena no se pone límites. En el que será con toda probabilidad su último Abierto de Estados Unidos, Serena Williams está decidida a pelear con todo en cada partido y lo demostró este miércoles con una espectacular victoria por 7-6(4), 2-6 y 6-2 ante la estonia Anett Kontaveit, número dos del ránking WTA.
A sus 40 años y con 23 ‘grandes’ brillando en sus vitrinas, Serena sigue dando muestra de su incansable espíritu competitivo y retrasó el adiós al tenis que anunció semanas antes del comienzo del Abierto estadounidense; sugiriendo que sería tras este torneo.
De momento, Serena celebró su victoria número 367 en un ‘grande’ confirmándose intratable en las rondas iniciales de estos torneos; en los que solo cayó dos veces en su larga y exitosa carrera, contra su hermana Venus en 1998 en Australia y ante la española Garbiñe Muguruza en Roland Garros 2014.
La leyenda estadounidense se enfrentará este viernes en la tercera ronda a la australiana Ajla Tomljanovic.
Serena no se pone límites
Tras las grandes celebraciones del lunes, día de su debut, cuando la Arthur Ashe preparó un mosaico con la escrita ‘Serena’; este miércoles el ambiente en la pista era de alta concentración y tensión tenística para un partido contra la número dos del ránking mundial.
Sin embargo, las gradas estaban repletas de famosos, como el golfista Tiger Woods, ganador de quince ‘grandes’; el cineasta Spike Lee; además de la hermana de Serena, Venus Williams.
Pese a comenzar con algunos errores no forzados, Serena se movió mejor e hizo daño a Kontaveit en particular con su derecha; acumulando seis tempraneros golpes ganadores y llegando a tener hasta cinco bolas de rotura, sin conseguir convertirlas.
Golpea primero y Kontaveit responde
Apoyada en cada punto por el público, Serena aprovechó su sexta oportunidad de rotura para ponerse por delante 5-4; pero entregó su servicio a continuación, con doble falta en el último punto, y tuvo que pasar por el desempate para poder tomar ventaja.
Bajo a atenta mirada de su hermana Venus, disputó un desempate excelente, apoyada por un saque ganador que le dio el 7-4; sin embargo, Kontaveit tuvo una reacción de orgullo inmediata y arrancó el segundo parcial como un tiro, al romper el saque de Serena a cero y al escaparse con facilidad hacia el 3-0, para abrirse el camino hacia un duro 6-2 que igualaba el duelo y forzaba el set decisivo.
La batalla, su hábitat
Se abrió una batalla y Serena sacó su alma competitiva, se encomendó a su servicio y agredió al resto para lograr; en su tercera bola de rotura, el ‘break’ para colocarse 2-0 arriba.
El público, volcado con ella, hasta empezaba a abuchear a Kontaveit y cuando Serena se dio cuenta intervino haciendo vistosos gestos con una mano pidiendo que pararan; había tomado el mando a nivel anímico Serena y, pese a entregar su servicio en el tercer juego, siguió mordiendo y consiguió un nuevo quiebre para ponerse por delante 4-1 y abrirse el camino hacia el definitivo 6-2.
Dobles con Venus
Serena también participa en el Abierto de Estados Unidos en dobles junto a su hermana Venus; con la que no competía desde 2018, al haber recibido una carta de invitación del torneo.
La última vez en la que Serena y Venus compitieron juntas fue en Roland Garros de 2018; en ese caso perdieron ante la española María José Martínez Sánchez y la eslovena Andreja Klepac.
Serena y Venus conquistaron juntas catorce ‘grandes’ en dobles; incluidos los Abiertos de EE.UU. de 1999 y de 2009.