Redacción,- Al menos cinco personas murieron como consecuencia de la tormenta tropical Debby, que avanza este martes por el sureste de Estados Unidos con lluvias torrenciales y una amenaza de inundaciones.
El temporal, que alcanzó la costa de Florida el lunes como un huracán de categoría 1 -en una escala de 5-, se desplaza ahora por el sur de Georgia rumbo a Carolina del Sur.
Tras alcanzar un pico de 120 km/h, sus vientos máximos sostenidos bajaron hasta los 75 km/h, indicó el centro estadounidense de huracanes (CNH) en su último boletín.
Debby dejó cinco muertos el lunes. En Florida tres personas fallecieron en dos accidentes de tráfico por culpa de las malas condiciones climáticas y otra por la caída de un árbol sobre su casa rodante.
La quinta víctima, un joven del sur de Georgia, también murió cuando un árbol se abatió sobre su vivienda.
«Debby podría producir cantidades de lluvia potencialmente históricas de 25 a 50 cm», causando «inundaciones catastróficas» en ciertas zonas de estos estados del sureste, según el CNH.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, advirtió el lunes que una «amenaza continua» de inundaciones seguiría cerniéndose sobre partes del estado en los próximos días.
Estado de emergencia
El CNH prevé que Debby se desplace lentamente por el sureste de Georgia hasta que su centro llegue al océano Atlántico el martes por la tarde. Luego la tormenta recorrerá la costa hacia el norte hasta el jueves por la mañana, cuando volverá a tocar tierra en Carolina del Sur.
El presidente Joe Biden declaró el estado de emergencia para Florida, Georgia y Carolina del Sur, una medida que facilita la asistencia federal. El mandatario «sigue instando a los residentes a permanecer vigilantes y prestar atención a las advertencias de las autoridades locales», dijo la Casa Blanca en un comunicado.
Kamala Harris, candidata demócrata a las elecciones presidenciales de noviembre, pospuso actos que iban a celebrarse esta semana en Carolina del Norte y Georgia a causa del temporal, según medios locales que citan a su equipo de campaña.
En julio el huracán Beryl, inusualmente precoz, golpeó el sur de Estados Unidos y dejó varios muertos.
Según la Oficina de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA), la temporada de huracanes de este año en el Atlántico -que va de junio a noviembre- se perfila particularmente agitada debido a la elevada temperatura oceánica que aumenta la intensidad de estas tormentas.