TSE inicia programa “Enséname a Trabajar” para hijos de empleados de esa alta corte
Santo Domingo – El Tribunal Superior Electoral inició el programa “Enséname a Trabajar”, para desarrollar habilidades laborales en los hijos de colaboradores de esa alta corte.
El proyecto consiste en una iniciativa que tiene como propósito apoyar en la formación de los hijos de los servidores del TSE en edades de los 14 y 18 años y que cursan el bachillerato, para que tenga la oportunidad de integrarse a las labores cotidianas en la asistencia en áreas administrativas y técnicas o afines de esa dependencia.
El presidente de la alta corte, magistrado Ygnacio Pascual Camacho Hidalgo, informó que la integración de los estudiantes contó con la anuencia de los padres, para lo cual se realizaron varias reuniones previamente.
“La idea es crear en ustedes hábitos de trabajo, de compañerismo, sociabilidad; porque no solo van a venir aquí hacer determinadas labores, sino que también van a recibir muchas orientaciones” sostuvo el magistrado.
El programa se ejecutará cada año, durante el periodo de vacaciones escolares que comprende los meses de junio, julio y agosto y que se implementa por primera vez la alta corte, servirá de base para que los jóvenes adquieran las destrezas que le permitirá inserción en el ámbito laboral.
Los jóvenes admitidos recibirán cada mes un incentivo o compensación por las labores realizadas como forma de ayudar con los gastos educativos, y además generar en ellos la vocación y responsabilidad, utilidad y el interés de trabajar en el futuro.
El Tribunal Superior Electoral, también cubrirá la inscripción o matrícula en la Universidad, a los jóvenes bachilleres, sobresalientes en cada período de ejecución y participación.
Los hijos de los servidores públicos, deberán ingresar a la hora de inicio de las labores 8:00 de la mañana y culminarán sus labores a las 4:00 de la tarde, siempre acompañado del padre o la madre servidoras del TSE.
Motivación del Proyecto
La falta de oportunidades de inserción laboral y social que genera deserción en las escuelas entre jóvenes, lo que se constituye en condición sustancial para que este segmento poblacional sea vulnerable y susceptible de caer en actos reprensibles para la sociedad.