Ginebra.- Unos 7.000 palestinos han desaparecido en la Franja de Gaza desde que empezó la guerra entre el grupo islamista Hamás e Israel, los que se suman a los 22.313 muertos y 57.296 heridos reportados a Naciones Unidas por el Ministerio de Salud del enclave.
Esos datos figuran en el informe diario sobre la situación en Gaza de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, que recalca que el 70 % de las víctimas son mujeres y niños.
De los desaparecidos, señala que muchos estarían enterrados aún bajo los escombros.
Por otra parte, el organismo señala que la ONU y otras entidades humanitarias llevaban hasta este miércoles tres días sin poder suministrar ayuda humanitaria vital y urgente al norte de Gaza debido a los retrasos y a la denegación de acceso, así como al peligro propio de los combates.
Esa ayuda que sigue sin llegar incluye medicamentos de carácter vital para más de 100.000 palestinos durante 30 días, así como ocho camiones de alimentos para personas «que actualmente se enfrentan a una inseguridad alimentaria catastrófica y potencialmente mortal».
La ONU estima que 1,9 millones de gazatíes (85 % de la población) han empezado 2024 como desplazados internos y que muchos de ellos se han desplazado forzosamente varias veces y siempre para sobrevivir.
Casi 1,4 millones de desplazados internos se refugian en 155 instalaciones de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en las cinco gobernaciones de la Franja, entre las cuales la de Rafah (frontera con Egipto) es ahora el principal refugio para ellos.
Más de un millón de personas se encuentran en el territorio reducido de Rafah, tras la intensificación de las hostilidades en Kan Yunis y Deir al Balah, y las órdenes de evacuación del ejército israelí.