Santo Domingo.- El viernes santo para la iglesia católica es día de luto y penitencia en el país, debido a que se conmemora la pasión de Cristo, así como su crucifixión y, finalmente, su muerte.
Este día es el único de todo el año en que los católicos no consagran la hostia, sino que la eucaristía que se comparte entre los católicos este viernes es consagrada el Jueves Santo (ayer).
A pesar de que no se realiza su principal sacramento, las ceremonias siguen con mayor rigor. empiezan con la meditación del Sermón de las Siete Palabras, contrastando las últimas palabras de Jesús en la cruz con realidades sociales.
