BRASILIA, BASIL.- Los hermanos José y Germán Efromovich, accionistas de Avianca Holdings han venido sufriendo una recaida tras otra, luego de que el 14 de julio la justicia decretó la quiebra de la compañía aérea Avianca Brasil. Y, en la mañana de este miércoles, la Policía Federal de Brasil arrestó a los hermanos en una operación vinculada al caso Lava Jato, pero ajeno a la aerolínea. Los hermanos fueron detenidos en São Paulo por supuestos fraudes en contratos del astillero Ilha S.A. (EISA), perteneciente a los ejecutivos, con la estatal Transpetro, una subsidiaria de Petrobras responsable del transporte de combustible e importación y exportación de petróleo y derivados.
Los Efromovich son sospechosos de corrupción y blanqueo de capitales en la compra y venta de barcos. Transpetro habría tenido una pérdida de 611,2 millones de reales (111,1 millones de dólares) por contratos con EISA, controlada por el Grupo Synergy, vinculado a los hermanos, entre aplazamientos, suspensión de deuda, irregularidades en los acuerdos, entrega irregular de un buque Panamax y falta de entrega de otros tres barcos. La sospecha es que los empresarios pagaron 40 millones de reales (7,2 millones de dólares) a cambio de un contrato de 857 millones para proveer navíos. Según los investigadores, los sobornos habrían sido depositados mediante diversas transferencias a cuentas bancarias en el exterior.
En un intento por disimular los pagos, empresas vinculadas al astillero y a los hermanos habrían firmado un contrato de inversión falso en una tercera empresa extranjera de petróleo, también perteneciente a los empresarios, en Ecuador, que preveía el pago de una multa de 28 millones de reales en caso de cancelación del aporte.
El Ministerio Público Federal (MPF) de Brasil informó que la Justicia estaba de acuerdo con la prisión de los investigados. Sin embargo, posteriormente los benefició con la prisión domiciliaria por causa de la pandemia de la covid-19.