Redacción.- La administración de Joe Biden estudia sanciones contra el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, esto si procedieran a validar el presunto fraude electoral cometido por Nicolás Maduro para perpetuar su poder en esa nación.
La Casa Blanca además dictaría acciones contra los integrantes del Consejo Nacional Electoral (CNE), que ya anunció la victoria del dictador chavista sin exhibir una sola acta que pruebe la derrota de Edmundo Gutiérrez Urrutia y María Corina Machado, líderes de la oposición al régimen populista.
La Secretaria del Tesoro, el Departamento de Estado y el Consejo de Seguridad Nacional trabajan para dictar las sanciones contra los funcionarios judiciales que no tienen independencia institucional y responden a las órdenes directas de Maduro.
Esas sanciones que ejecutaría Biden desde la apertura de causas por corrupción hasta la cancelación de visas- se pondrán en marcha si el Tribunal Supremo de Justicia corona la segunda reelección del dictador. Y en el caso del Consejo Nacional Electoral, debido a que sus miembros abrieron el camino hacia la consumación de otro fraude en Venezuela.
La lista inicial de posibles sancionados también incluiría a oficiales y suboficiales de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, y su primer draft fue realizado en la Secretaría del Tesoro, que envío su nómina al Departamento de Estado y al Consejo de Seguridad de la Casa Blanca.
La inclusión de los cuadros militares y de seguridad tiene su argumento político: si Estados Unidos analiza castigar a los responsables materiales del fraude electoral, es lógico que además incluya en su index a los represores ilegales de Maduro que asesinan, golpean y torturan a la oposición.