SANTO DOMINGO.- Unos 400 mil dólares y más de 19.2 millones de pesos en efectivo fueron confiscados durante la Operación Discovery, una red acusada de ciberdelito, extorsión sexual y económica, así como al robo de identidad de ciudadanos de Estados Unidos.
La red se apoyaba en las criptomonedas y el sistema financiero nacional como medios para el movimiento de capitales en dólares y en pesos y adquirieron bienes millonarios producto de sus acciones criminales, indica la nota de prensa de la Procuraduría.
Los fiscales además ocuparon 30 vehículos de alta gama y 300 equipos electrónicos, incluyendo teléfonos móviles y computadoras.
En distintos allanamientos practicados en el país resultaron arrestados Sucre Rafael Rodríguez Ortiz (Darimán y/o Daria), Máximo Miguel Mena Peña, Emmanuel Castro Ozuna (Billete), Mayobanex Braulio Rafael Rodríguez Fernández, Ángel Rafael Peralta Guzmán, Genaro Antonio Hernández Caba, Pablo Miguel Balbuena (Miguel Ortiz y/o la Válvula) y David Antonio Guzmán Javier.
Conforme el Ministerio Público, los integrantes de la red se constituyeron en una asociación de malhechores que usurpaba funciones, y que incurrió en lavado de activos y en el porte y tenencia ilegal de armas de fuego.
Además de la extorsión sexual y el robo de identidad, los integrantes de la red realizaban llamadas telefónicas para intimidar, enviaban medicamentos mediante “delivery” e incluso usurpaban funciones oficiales de Estados Unidos, incluyendo la de agentes del FBI.
El desmantelamiento de esta red, conllevó la movilización de 45 fiscales, 105 técnicos y 321 agentes de la Policía Nacional, encabezado por la procuradora fiscal adjunta Yeni Berenice Reynoso; la Fiscalía de Santiago, representada por su titular, Osvaldo Bonilla; la Procuraduría Especializada Anti lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo, bajo la dirección de Ramona Nova Cabrera, y la Procuraduría Especializada contra Crímenes y Delitos de Alta Tecnología, encabezada por Iván Vladimir Félix Vargas.
El Ministerio Público también contó con el trabajo coordinado del Buró Federal de Investigaciones (FBI), de Estados Unidos, y la Dirección General de Investigaciones Criminales (Dicrim), de la Policía Nacional.